¿Alguien dijo que no se realiza cirugia estetica a hombres? Quien así piense está bastante desinformado. De hecho los tabúes que relacionaban la belleza física con el sexo femenino han ido desapareciendo y seguirán haciéndolo, de forma cada vez más rápida. El estilo de vida postmoderno que valora la imagen personal y todo lo que ella transmite, rindiendo culto a la belleza y la juventud, ha motivado que los hombres actualmente busquen todo tipo de productos y servicios para mejorar su apariencia como ropa de moda, perfumes, cremas para mejorar la textura de su rostro y evitar las arrugas y un muy largo etcétera. Pero en los últimos años esta tendencia se ha hecho más amplia con la realización de procedimientos de cirugía plástica para lograr esa imagen deseada. Ya no resulta suficiente recurrir a procedimientos estéticos para lucir mejor como masajes, tratamientos faciales, manicure y pedicure, gimnasia, dietas o moda. Ahora los hombres, en número muy significativo, solicitan cirugía estética de hombres que día a día gana más adeptos en todo el mundo.
En este rubro debemos considerar toda la cirugía estética que se realiza para mujeres y que puede aplicarse del mismo modo para el varón respetando las diferencias anatómicas del género, como la liposucción de abdomen, la abdominoplastía, el lifting o levantamiento facial, la blefaroplastia o cirugía de párpados, la rinoplastia, otoplastía, liposucción de cuello y papada, cirugía de glúteos, mentoplastía (cirugía del mentón), etc. De una forma adecuada al cuerpo varonil, todas estas operaciones tradicionalmente enfocadas en el público femenino, ahora se van dirigiendo al masculino, pues está visto que la cirugía estética de hombres es un nicho de mercado en expansión (en España ya supera el 20% de las operaciones de cirugía estética). No se trata sólo de verse mejor o más atractivo, sino de aumentar las condiciones para lograr éxito personal, laboral, e incluso sexual en un mundo extremadamente competitivo donde el que no corre…se opera.
Pero el tema no queda ahí, sino que ya se han diseñado operaciones de cirugía estética hombres que atienden problemas particulares del género, como implante capilar contra la calvicie, aumento de pectorales mediante uso de implantes de silicona, cirugía genital (engrosamiento del pene por inyección de grasa autógena, faloplastía o cirugía para el alargamiento del pene), ginecomastía (o reducción de mamas en el varón), entre otras. En general, en el campo de cirugía estética de hombres la operación más solicitada es la de implante capilar (siete mil operaciones por año), seguida de la liposucción y la operación de párpados.
Posiblemente en algunos países donde el machismo es más reducido o anda más camuflado por la presión social que demanda mayor libertad de género, las operaciones de cirugía estética para hombres vayan aumentando en número y también en variedad, más rápidamente, pero, igual que en el caso de las mujeres, no hay que dejarse llevar por promesas de mercachifles o encantadores que ofrecen resultados sorprendentes con el mínimo esfuerzo y una inversión que es una verdadera ganga. Hombres y mujeres deben buscar la calidad profesional que se convierta en una garantía de un resultado satisfactorio. La salud del paciente, independientemente de su género, es lo más valioso en la sala de operaciones, y así debe ser tratada.