Uno de los descubrimientos más innovadores en medicina, es la tecnología láser y su gran variedad de aplicaciones. ¿De qué se trato esto? En términos sencillos un láser es un haz o rayo de luz que, a diferencia de la luz convencional que emite haces en diversas direcciones, puede enfocarse con absoluta precisión en un punto determinado. Una vez enfocado, toda la energía se concentra en un espacio específico. En medicina, sus usos son variados, y se aprovechan en ramas tan diversas como odontología, oftalmología, oncología y también, cómo no, en la cirugía plástica. En el caso de la Cirugia Estetica, Laser es la técnica que ha revolucionado muchos de sus procedimientos, favoreciendo al paciente en muchas formas.
La Cirugía Estética Láser se aplica a tejidos grasos, por ejemplo, calentando las células adiposas hasta hacerlas “reventar”, sin lesionar vasos sanguíneos y facilitando la posterior absorción de la grasa disuelta, cuando se combina liposucción láser con la tumescente. El láser también permite realizar cortes internos sin el sangrado que se produce al hacer el corte convencional con bisturí. También sustituye las suturas convencionales, mejorando la cicatrización de los tejidos y sin dejar molestas marcas.
¿En qué consiste este gran invento que tanto ha aportado a la Cirugía Estética? Láser es la sigla en inglés de Light Amplification by Stimulated Emission of Radiation (ó Amplificación de Luz por Emisión Estimulada de Radiación), frutos de muchos años de investigación de científicos de todo el mundo, desde Alberto Einstein que sentó la base teórica a inicios del siglo XX, hasta Charles Townes y Artur Schawlow, considerados los inventores del láser actual (1960).
La Cirugía Estética Láser, como cualquier tipo de cirugía, no elimina los riesgos, sin embargo sí reduce o transforma muchos aspectos adversos, como el sangrado, la hinchazón, las cicatrices, y el dolor consecuencia de las heridas suturadas con puntos. Algunas cirugías láser deben realizarse usando anestesia general, sin embargo otras, como ciertas liposucciones menores, pueden realizarse con anestesia local y sedación, eliminando los riesgos inherentes a la anestesia general. También se reduce el periodo de convalecencia y permite un retorno más rápido a la vida normal.
La liposucción es una de las aplicaciones más conocidas de la Cirugía Estética Láser, no obstante tiene otros usos con un alto margen de beneficio para el paciente, como es el caso de las cirugías de rejuvenecimiento facial. En estos casos la luz láser realiza una especie de exfoliación de la capa externa de la piel, provoca un estímulo en la piel que promueve la formación de colágeno y elastina, en proceso de regeneración celular que permite lograr una piel más tersa y suave, con mayor tonicidad y una significativa reducción en la cantidad y profundidad de las arrugas. También es muy utilizado para eliminar marcas de piel, como cicatrices antiguas o marcas de acné, logrando resultados impresionantes en la gran mayoría de los casos. En este procedimiento sí habrá de evitarse la exposición directa al sol por aproximadamente seis meses o, en algunos casos, más.
