¿Se siente muy frustrada por tener senos pequeños? ¿Cree que se sentiría más feliz y segura de sí misma si tuviera un busto mayor? ¿La ropa que le gusta no la puede usar por el tamaño de su pecho? ¿No deja de extrañar el busto que lucía antes de sus embarazos, que lo han dejado fláccido y caído? ¿Muchas veces piensa cómo luciría tras una operación de aumento de mama?
Si ha contestado afirmativamente a más de una de las preguntas, probablemente sea una candidata óptima a cirugía de aumento de mama, una de las intervenciones de Cirugía Estética más solicitadas por las mujeres de todo el mundo. La razón, aunque a muchas personas no les parezca así, es bastante simple: no siempre se posee ese equilibrio entre el pecho y las caderas que brinda una figura considerada, por siglos, “femenina”. Hoy la cirugía estética permite que las mujeres que nacieron sin esa posibilidad, puedan remediar la situación, y lucir su escote con orgullo gracias a un busto tan natural o espectacular como desee.
La cirugía para aumento de mama o mamoplastia se basa en la inserción de un especie de estuche o bolsa de silicona rellena con gel de silicona (más suave) o con un gel cohesivo de silicona (más compacto) o en su defecto con una solución salina, permitiendo que el seno aumente de tamaño, mejorando su forma y consistencia. Los dos primeros rellenos son los más conocidos y usados en la actualidad para el aumento de mama. Se les ha investigado por décadas y están autorizado por las más importantes autoridades sanitarias a nivel internacional, incluyendo a la FDA (Federal Drugs Administration, de Estados Unidos). La superficie del “estuche” o bolsa también viene en diferentes presentaciones, que se adaptan al gusto de la paciente pero también a las particularidades quirúrgicas de cada caso.
El tamaño del implante es un tema vital en las intervenciones de aumento de mama, y deben elegirse teniendo en cuenta el gusto particular de la paciente pero también el consejo experto del cirujano, que con su experiencia profesional podrá orientar la elección para que sea la más satisfactoria, ya que, es importante que las mujeres lo sepan, el tamaño de un implante para el aumento de mama muchas veces puede verse limitado por la estructura particular del tejido de la paciente o la elasticidad de la piel.
La inyección de grasa como técnica para lograr un aumento de mama es aún un procedimiento experimental y no se tienen resultados concretos respecto al costo-beneficio. Se dice que podría tener como peligro la necrosis grasa o la embolia, por lo que está siendo sometida a más investigación.
¿Qué requisitos se deben tener para presentarse a solicitar una operación de aumento de mama? Pues además de un estado físico perfecto y los estudios regulares establecidos para este tipo de procedimientos, es necesario también un estado de salud mental en equilibrio, es decir, demostrar que su deseo de operarse es consecuencia de necesidades personales o carencias físicas debidamente sopesadas, y no de un desequilibrio emocional, permanente o pasajero.