Si alguna vez has pensado… “¿qué no daría por tener unos glúteos como esos?”, pues tu deseo no es más algo inalcanzable con la cirugía estética y las operaciones de aumento de gluteos que pueden hacer mucho por ti, cuando la naturaleza no hizo su trabajo o los años hicieron el suyo. Gracias a la gluteoplastia se puede aumentar el volumen de las nalgas (poco o mucho, dependiendo de la necesidad) o mejorar su forma, permitiéndote una figura que te brinde seguridad y satisfacción.
Una modalidad para el aumento de glúteos es infiltrar grasa de la propia paciente si la posee en exceso en el abdomen u otras partes del cuerpo, y se realiza junto a lipoescultura, logrando moldear la zona de manera muy precisa. La otra modalidad es usando prótesis o implantes de silicona, cuando la paciente no cuenta con grasa extra o cuando el aumento de glúteos que se busca es mayor.
Los cirujanos plásticos hoy en día trabajan para lograr un resultado lo más natural posible, dentro de las expectativas de la paciente. Años atrás se usaban implantes similares a los usados en los senos, de silicona líquida, que por tener una cubierta muy delgada a veces ocasionaban contracción capsular y hasta ruptura de los implantes con las complicaciones evidentes. Actualmente los implantes para aumento de glúteos se colocan entre los músculos de la nalga, donde a través de una incisión se crea una especie de bolsa que contiene al implante, el que así ubicado quedará cubierto por la fascia muscular, protegiendo el implante y evitando irregularidades.
Todo cirujano plástico confiable realizará una evaluación completa de su estado físico y de su historia clínica para asegurar la viabilidad de la intervención antes de programarla. La cirugía de aumento de glúteos, como toda cirugía, conlleva un nivel de riesgo el que debe ser evaluado por el paciente junto a los beneficios que le permitirá alcanzar.
Si está programada para un aumento de glúteos, tenga presente que no debe consumir ningún medicamento que contenga ibuprofeno y/o ácido acetilsalicílico (como aspirina o sal de frutas) ni consumir licor quince días antes de la cirugía. Tampoco deberá depilarse el área genital de ningún (ni navaja, ni cera). Se debe evitar fumar, tener contacto con animales y comer alimentos pesados.
Luego de la cirugía de aumento de glúteos el o la paciente tendrá algunas horas de recuperación en la clínica. En algunos casos podrá pasar la noche en ella y luego retirarse a casa. Dado que la intervención se realiza con anestesia es general o con sedación y anestesia local, el postoperatorio podrá variar un poco.
Luego de la operación requerirá reposo en cama por 48 horas, en posición boca abajo, de preferencia con una almohada bajo las piernas, pero intentando caminar un poco. Luego deberá continuar un reposo relativo por varios días sin alzar pesos ni realizar movimientos bruscos. Podrá sentarse a partir del quinto o sexto día de la intervención de aumento de glúteos. Su dieta deberá ser blanda y rica en fibra y el cigarrillo estará totalmente prohibido por los primeros 90 días. Durante los tres primeros meses habrá un grado de inflamación que no permite visualizar el resultado final, el que se podrá apreciar recién pasados los seis meses. Los masajes de drenado linfático, luego de los diez días, es una excelente opción.